Alejada del foco mediático desde que se convirtió en madre de su tercer hijo junto a Jesulín de Ubrique -Hugo, de dos años- María José Campanario ha regresado por sorpresa a televisión y nos ha dejado ¡sin palabras! Destapando su talento oculto para la música, la odontóloga se ha atrevido a participar en ‘Mask Singer’ como una adorable oveja a la que ninguno de los miembros del jurado del talent de Antena 3, Los Javis, Alaska y Ana Milán, han sido capaces de descubrir.
Amaia Montero, Leire Martínez, Gemma Mengual y Mireia Belmonte fueron los nombres que sonaron entre los investigadores sobre qué famosa estaría debajo de esta máscara, pero a nadie se le había pasado por la cabeza que sería la mujer del torero la que se escondía detrás de la ovejita con apariencia de abuela que dejó a todos impactados con su interpretación de ‘Let me out’ de Dover no solo por su bonita voz, sino también por sus movimientos ágiles y coordinados sobre el escenario.
Nada más descubrir su identidad al quitarse el disfraz, María José ha reconocido pletórica que ha sido una experiencia inolvidable participar en ‘Mask Singer’, confesando que a pesar de haber estado solo una semana en el programa se lo ha pasado muy bien, y además ha logrado dejar en shock tanto a la audiencia como a los miembros del jurado.
Un regreso por todo lo alto a televisión que ha ocultado incluso al propio Jesulín, que no sabía nada ni tampoco ha sospechado que su mujer pudiese ocultarse bajo uno de los disfraces del programa presentado por Arturo Valls. «Cariño, es la primera vez que te engaño, pero era por un motivo importante» ha dicho entre risas al torero desde el programa tras quitarse la máscara.
Desde casa, María José ha compartido en Instagram la reacción de su marido al descubrir que la ovejita era nada más y nada menos que ella. «¿Cuándo has hecho tú eso?» le ha preguntado muy sorprendido, demostrando que no sabía nada de que su mujer había viajado hace unos meses a Madrid para participar en ‘Mask Singer’.
Tampoco tenían ni idea sus hijos Julia y Jesús Alejandro, que como ha asegurado la odontóloga en el programa «van a llorar de la risa» cuando la viesen dándolo todo sobre el escenario disfrazada de oveja.
«La gente me daba por muerta, desaparecida, como que no vivo, no salgo… Creo que la gente tiene la idea de que no tengo vida, y no. Soy bailonga, tencho mucha marcha, me gusta cantar y bailar» ha confesado, feliz tras su sorprendente paso por ‘Mask Singer’.