Para el pescador febrero es sinónimo de playas y buena cosecha, pero si pensamos en Orense, Claromecó y Reta, la mente nos lleva a la gran fiesta de la corvina negra que se realiza desde hace más de seis décadas en estas costas que bañan el partido de Tres Arroyos. Para aquellos aficionados que piensen en visitar estos destinos, una corta pero importante guía de los pesqueros con los que nos podemos encontrar, no sólo pensando en los concursos sino en los intentos del pescador recreativo.
Orense
El balneario Orense está situado a 580 km de Buenos Aires, con acceso en el Km 85 de la Ruta 72, siendo el más joven del partido de Tres Arroyos. Esta zona se caracteriza por sus fondos, donde alterna entre suaves declives con canaletas y formaciones rocosas extensas, lo que nos permiten tener una dualidad de posibilidades. Por el lado del Oeste, hacía Claromecó, existen pedregales de excelente rendimiento. A pocos metros de la costanera nos encontramos con La Media Luna, que con mar bajo permite ir al filo de las piedras, cerca de la rompiente, y pescar tanto a media como a larga distancia. Este sitio entrega muy buenos rendimientos de corvinas, gatuzos y especies de piedras como los chanchitos. En el mismo lugar, con mar crecido se forma una bahía de aguas muy calmas y poca profundidad lo que toma temperatura y es espectacular para pescar lisas y pejerrey. Más hacia Claromecó está el Sexto Salto, muy rendidor para la búsqueda de corvinas. Otro punto notable es conocido por el nombre de Pozo de Julián, cercano al Quinto Salto. Se trata de un destino muy bueno para la pesca de corvinas y variada, y es normal en algunos claros pequeños de playa de arena entre estos saltos, la pesca de chuchos y rayas pedreras. Allí. en la edición 2023 de “Las 24”, hizo una pasada firme la corvina en la madrugada y les permitió a varios pescadores clasificar y a Gustavo Barrionuevo ganar el torneo. Los aficionados que opten por el Este de Orense, tendrán como referencia la zona de La Forestal, donde en la primavera se da mucho el cazón. En todas estas latitudes, por la profundidad de sus aguas, es normal sacar chuchos, violines, rayas de piedra y sapos. Siguiendo hacia el este, nos encontramos con lugares con grandes bancos, donde la pesca es muy abundante hablando de corvinas, pescadillas y gatuzos. El último punto es el arroyo Cristiano Muerto, de lecho pedregoso y poca profundidad. Se lo puede vadear con cualquier vehículo sin importar la marea; tiene la particularidad de ser muy rendidor para los lenguados y pejerreyes, aunque aquí también se logra buena variada. Por último, la zona comprendida entre los pedregales de Orense y el Pozo Julián es ideal para la pesca de sargos, pero ha pagado en el mítico torneo del Club Cazadores, allí, según dice la historia, se ganó el año pasado con una rubia de 3,206 kg que picó en la madrugada.
Claromecó y Reta
Si destacamos pesqueros aledaños a Claromecó y Reta, nos encontramos con una multiplicidad importante de opciones, tanto para el Faro como hacia el lado de Dunamar. En este punto, hay una sucesión de sitios muy rendidores, empezando por la desembocadura del arroyo, con intensa actividad de lenguados, el famoso Pozo de Blas Fernández, con rica variada, El Letrero, siempre con corvinas, pescadillas y gatuzos. Las Piedras de Franganillo, donde se destacan los sargos a corta distancia, se dan muy buenas corvinas y alguna raya pedrera. Más adelante advertimos el Salto de Cristian, muy similar al anterior, como al siguiente, el famoso Caracolero. Allí encontramos una bahía que, cuando hay media marea, tiene poca profundidad y el agua toma temperatura, siendo una excelente opción para pescar lisas. Un clásico son las Plantas de Ernesto Kulmman, siempre con rica variada, y el Médano Blanco un lugar muy profundo, donde es normal sacar chuchos, violines, bagres y alguna corvina de gran porte (playa de arena). Allí, el año pasado estuvo la negra ganadora, aquel ejemplar de 2.928 kg y le dio la victoria a Pablo Fernández. Un punto que tiene historia con el concurso de “las 24” es La Virgencita, donde se dio la negra de 2020, en esa inolvidable captura del salteño Carlos Alsogaray.
Hacia el lado del Faro los pesqueros tienen abundancia de pedregales. Esos puntos arrancan con el Primer Salto, un pesquero que entrega corvinas, variada y sargos. Tras él, vienen Las piedras de Victoria, famosa por sus buenos sargos, y el Pozo de Alonso, con variada y algunas corvinas de buen porte. Advertimos a continuación una serie de saltos, el segundo, con piques a corta distancia de sargos, y a media y larga distancia, de corvinas, pescadillas y rayas pedreras de buen porte. El tercero, con muy buenas corvinas, un pesquero corvinero por excelencia donde también es normal capturar gatuzos, pescadillas y variada. Es fantástico para el sargo. En el salto Tres y Medio nos encontramos con otro lugar ideal para las corvinas, en una cancha que ha dado muchos ganadores de las 24 hs, entre ellos, Matías Filas, con una rubia de 3,814 kg pescada en la madrugada del 11 de febrero de 2019. El Cuarto Salto, un planchón de piedra muy largo, muy funcional, donde se pueden pescar sargos, corvinas, pescadillas, gatuzos, chanchitas y violines. Tiene una bahía muy profunda por lo que, además de corvinas, es normal que se cobre algún chucho de buen porte.
Decenas de kilómetros con escenarios distintos para disfrutar la actividad, desde sectores libres de enganche y con buen pique a pedregales donde los cortes son monedas corrientes pero la chance de pescar se acrecienta. Para disfrutar un fin de semana cualquiera, o para competir en el marco de “las 24 horas”, consejos y una breve recorrida por los principales puntos de la costa tresarroyense.