El escenario conflictivo no deja de escalar en el ámbito aceitero. Tras activar una medida de fuerza en las plantas que Vicentin posee en las localidades santafesinas de Ricardone y San Lorenzo, el Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros (SOEA) optó por desoír la conciliación obligatoria fijada por el Ministerio de Capital Humano nacional y lanzó un paro nacional que frenó por completo la actividad en, por ejemplo, el complejo de puertos exportadores de Rosario. Además del reclamo salarial, SOEA puso como argumento para implementar esta medida un cruce ocurrido con un grupo antipiquete de la Prefectura Naval Argentina en torno a la planta de biodiesel de la firma Explora.
Además del SOEA, la Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso (FTCIODyARA) también se plegó a la medida y ambas organizaciones aún no establecieron en qué momento pondrán fin al paro.
Desde la Cámara de la Industria Aceitera Argentina (CIARA) se indicó que la paralización de la actividad ocurre a partir de un evento externo, dado que Explora no pertenece a ese rubro.
«El sindicato aceitero acaba de volver a decretar la paralización de todas las fábricas y puertos de la zona de Rosario. Alegan que hubo incidentes en la puerta de la empresa Explora. El conflicto con esa empresa es ajeno a nuestra industria«, informó la entidad a través de su espacio en la red social X.
«Recordemos que estamos desde anoche en conciliación obligatoria. Es ilegal cortar las plantas, por lo que se están realizando las denuncias correspondientes. Llamamos a la sensatez de los líderes sindicales que deben dejar de lado objetivos políticos personales y volver a la mesa de negociación donde ya la industria ha garantizado que ningún salario perderá frente a la inflación de este año», añadió.
En sintonía con esto, Gustavo Idígoras, titular de CIARA, remarcó que «las conciliaciones son obligatorias y no puede haber movilizaciones de ningún tipo».
Aceiteros y Vicentin: un conflicto sin final a la vista
Del otro lado, portavoces de SOEA sostienen que iniciaron el reclamo a raíz del despido de cuatro trabajadores de Explora. Afirman que recrudecieron las medidas de fuerza producto de que los operarios cesanteados no fueron reincorporados tal como, precisamente, establece la conciliación obligatoria.
Producto de esta movilización sindical, las autoridades desplegaron a 60 agentes de la Prefectura Naval Argentina y se sucedieron cruces con los afiliados al SOEA durante la noche del miércoles.
La instauración de un paro nacional en el sector de los aceiteros sigue al cese de actividades aplicado tanto por el SOEA como por la FTCIODyARA en dos plantas de Vincentin, también durante la jornada del miércoles.
En ese caso, el paro se estableció luego de que la firma anticipara que sólo cubriría el 30% de los sueldos. La compañía en cuestión notificó su decisión a través de un comunicado divulgado en las últimas horas del domingo.
«La empresa informa que debido a la crítica situación financiera por la que atraviesa actualmente, se ve imposibilitada de afrontar el pago de la totalidad de los haberes devengados del mes de febrero«, indicó Vicentin.
«Por ende, el lunes 10 de marzo acreditará el 30% del neto correspondiente, siendo una prioridad a medida que se reciban fondos anticipados provenientes de los fasones a realizar, ir cancelando los haberes hasta completar el 100% de los mismos», añadió.
Según fuentes de la actividad agroindustrial, la falta de fondos para el pago de salarios que evidencia Vicentin colocó en situación de suspenso la continuidad de alrededor de 1.200 puestos de trabajo.
Vicentin y la vuelta de la intervención judicial
Al mismo tiempo, ambos gremios metieron presión y lograron que la Justicia hiciera lugar su reclamo y se estableció la intervención de la empresa por un lapso de 120 días. La medida fue fijada por el juez Fabián Lorenzini.
Producto de esta decisión, se designó como veedores a Guillermo Nudenmberg y Andrés Schocron, quienes ya habían ejercido esa tarea durante 2024. Este cambio de status ocurre a partir de las denuncias de presuntos problemas en la administración de la firma agroindustrial elevadas por los sindicatos mencionados.
Vale señalar que la empresa viene de sufrir un reciente revés judicial. La Corte Suprema de Justicia de Santa Fe rechazó la homologación del concurso, lo que dio lugar a un recurso de inconstitucionalidad planteado por Commodities SA, uno de sus principales acreedores.
La decisión judicial adversa complica aún más el ya frágil panorama de Vicentin, que desde fines de 2019 atraviesa una profunda crisis financiera, con una deuda millonaria –superior a los u$s450 millones–, en especial con el Banco Nación.