La apertura indiscriminada de las importaciones, combinada con la retracción del consumo que sigue evidenciando ese nicho, mantiene en una instancia crítica a la producción de calzado que se realiza en la Argentina. Dado este contexto, las suspensiones y los recortes de personal en ese segmento vienen cobrando fuerza sobre todo en el interior del país. En ese sentido, el achique más reciente tiene lugar en Grupo Dass, proveedora de Nike, Adidas, Umbro y Fila, entre otras marcas, y que acaba de activar cerca de 200 despidos en su planta de Eldorado, en la provincia de Misiones. La compañía bajó la persiana de sus instalaciones productivas en Coronel Suárez, provincia de Buenos Aires, en enero de este año.
Al momento de dar cuenta de este nuevo recorte, la compañía emitió un comunicado señalando que la medida de reducir el personal responde a que «la industria nacional de calzado enfrenta nuevos desafíos por la caída en la producción y la apertura de importaciones, y Grupo Dass no es ajeno a esta crítica situación».
«Frente a la pérdida de competitividad por los altos costos locales y las cambiantes exigencias del mercado, sumado al nuevo contexto cambiario y comercial, hemos agotado todas las alternativas para mantener nuestra estructura actual«, expresó Dass, que además operar en Argentina también cuenta con representaciones en Brasil, Perú y Paraguay.
Dass reconoce una coyuntura comercial adversa
«Teniendo como objetivo mejorar la eficiencia y competitividad en Argentina, y siendo plenamente conscientes del impacto que esta medida representa, Grupo Dass comunica, luego de haber agotado todas las instancias posibles, la desvinculación de 164 colaboradores de la planta de Eldorado, como parte de un proceso de adecuación a las demandas actuales de los clientes de la fábrica», añadió.
Sin embargo, en el ámbito de los empleados de la compañía aseguran que los despidos se ubican por encima de los 200.
Las cesantías aplicadas por la firma achicó a 350 el número de operarios que aún cumplen funciones en Eldorado. En su mejor momento, la planta llegó a contar con hasta 1.700 trabajadores que producían a razón de 22.000 pares de zapatillas a diario. En los últimos meses, ese volumen se redujo hasta rozar los 8.000.
El recorte aplicado generó la queja de gremios como la Unión de Trabajadores de la Industria del Calzado de la República Argentina (UTICRA), que a través de sus representantes advirtió que la empresa del calzado podría acentuar aún más los despidos en las próximas semanas.
Respecto de la supresión de puestos de trabajo, Silvana Giménez, ministra de Trabajo de Misiones, declaró que «nos anoticiamos el día viernes, a través de los delegados gremiales».
«Los trabajadores empezaron a recibir los telegramas de despidos. Todavía no pudimos hacer contacto con la empresa, porque el gerente estaba con un parte médico. Pero bueno, la idea es poder hacer una reunión», dijo.
«A nosotros lo que podemos (hacer) es acompañar y ver que cada trabajador reciba la indemnización que le corresponde», sostuvo, para luego afirmar que las cesantías responden a «una coyuntura económica y es una decisión de la empresa, que es una empresa privada».
Dass y el antecedente de enero
La producción de indumentaria y calzado atraviesa un contexto turbulento a partir de la apertura de las importaciones, la suba de costos y la retracción del consumo. Además de Dass, firmas como Bicontinentar o Calzatex también atraviesan una crisis por demás dramática.
Previo al recorte de personal aplicado ahora en Eldorado, Dass inició 2025 desactivando sus instalaciones productivas en Coronel Suárez, provincia de Buenos Aires. El cese de actividades fue notificado por la firma a través de sendos telegramas enviados a sus casi 360 operarios en esa ciudad.
El fin de las operaciones de Dass en Coronel Suárez fue expuesto por medios locales, que rápidamente viralizaron los telegramas recibidos por los empleados de la compañía a partir del jueves 2 de enero. La planta suarense dejó de operar el 20 de ese mismo mes.